6.1.19


Supe de tu rastro en los ojos que mirabas al pasado
hasta mirarme como una pintura rota hecha en el siglo XV
una mujer leyendo, la Virgen que espera
levanta el dedo -seguiré leyendo-
vi que no había una acepción de correcto, todo era culpable
porque el pasado arrastra la memoria del error

me vi subida a una columna mientras mirabas las grietas
como un macarrón se envolvía en sí misma, en la inconsistencia
me vi abrazada al vapor de agua,
a un placer efímero pero no falso, no entero
pero que quizá podría guardar, podríamos guardar
como una forma de la naturaleza se guarda a sí misma
y se repite en estructura
como los acontecimientos de escena global

las oes de voces del abismo debajo de la columna
abrieron el hueco preciso para hundirla
y mientras bajaba hacia la nada
me decías -pensé en ti-
aparecí en tu recuerdo y apareceré
aunque la torre esté enterrada y sobresalga solo mi frente
la punta de la memoria

nadie olvida los grandes acontecimientos

ira ira ira ira ira ira ira ira ira ira ira ira  ira ira ira ira ira ira